Determinar el porcentaje de pacientes con demencia o deterioro cognitivo leve (DCL) que tienen registrado el Documento de Voluntades Anticipadas (DVA) así como analizar las diferencias sociodemográficas entre ellos.

En febrero de 2025 se realizó un análisis descriptivo que incluyó a personas mayores de 60 años diagnosticadas con demencia adquirida o DCL. Para la clasificación socioeconómica se utilizó el Índice de Privación (IP), aunque en el 23% de los casos no se disponía esta información.

En el área de salud estudiada se identificaron 5827 personas con demencia o DCL, con una edad media de 85 años (rango: 60-106 años). La mayoría tiene nacionalidad española y el 60% son mujeres.

Entre las personas con demencia, el tipo más prevalente es la enfermedad de Alzheimer, con 1878 casos (60,6%), seguida de la demencia vascular (18%) y la demencia con cuerpos de Lewy (10,5%). El 54,28% de la muestra corresponde a personas diagnosticadas con DCL.

De los 5827 pacientes con algún grado de deterioro cognitivo, solo 121 (2,08%) tienen registrado el DVA. Este porcentaje es ligeramente mayor en personas con DCL (2,47%) que en aquellas con demencia (1,64%). El análisis por niveles del IP no mostró diferencias estadísticamente significativas entre los distintos grupos socioeconómicos en cuanto al registro del DVA (p = 0,96), con proporciones que oscilan entre 2,4% y 2,9%.

Solo el 2,08% de las personas con demencia o DCL tienen registrado el DVA, sin diferencias relevantes entre niveles socioeconómicos.

Dado que estas condiciones pueden predisponer a la pérdida de capacidad de toma de decisiones, especialmente en fases avanzadas, sería conveniente promover estrategias de información y facilitar el registro del DVA tanto al diagnóstico como durante el seguimiento clínico. Esta acción contribuiría a respetar la autonomía de los pacientes, garantizar sus deseos en la atención futura y mejorar la planificación asistencial.